Por Sergio Nina / Ayllu chullpa – Norte de Potosí A lo lejos, escuchamos un silbido. No, no son las sirenas de la policía, no es la bala asesina, es el Jula Jula [1] que con fuerza y energía nos llama al encuentro. Hermana, abre tu ventana y deja que este ritmo llegue a todos los rincones de tu casa, viene desde las cumbres, cerca de las estrellas, cerca de nuestra chakana, viene con ritmo vigoroso que nos llenará de voluntad, de fe y de dignidad, ya conocemos los caminos angostos empinados y rocosos, sabemos andar en zigzag haciendo más fácil la llegada. Los pueblos supieron caminar con un modelo de vida, en sociedades de exterminio, con modelos de hambre y de muerte. Nuestros pueblos ya conocen el camino, el sufrimiento, dolor, el hambre, la sed, el ardor del látigo opresor. El Ju Ja Ju, nos llaman a encontrarnos en el T’inku, en el círculo donde todos somos pares, donde todos rotamos. Las banderas blancas, las Janq’u...